jueves, 26 de junio de 2008
Vuelvo a anudar
Este artefacto no deja de sorprenderme, después de varios dias funcionando solo con la bateria, desconectado de la red, viendo que aquella estaba cargada al cien por cien, opto por quitar la conexión. Resultado: aparato que se me apaga y me deja con un palmo de narices, igual que el niño al que se le quita de la mano un caramelo, por ejemplo, en mi caso podria decir que con cara de bobo y con los dedos igual que si estuviese tecleando dormido en la cama. Me he acordado de su ascendencia, aunque él carezca de madre conocida, pero es lo clásico en estas situaciones. He vuelto a enchufarlo y aquí me encuentro en la penumbra del salón, con el aire apagado por temor a las afecciones garganteras; acaso yo no sea tan propenso a sentir el o la calor como alguno/as que conozco y que no se encuentran muy " lejana/os de mi entorno"; no quiero ser reconvenido por la menistra de igualdad, digo bien: "menistra", denominación con la que seria conocida por las tierras de donde ella procede. Hago la distincion así en lugar de "miembro", -suena raro, ¿verdad?, o "miembra", que según ella seria lo políticamente correcto. Lo dejamos por hoy, creo es suficiente. ¡¡Hasta la próxima!!, prole.
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