Nadie me oye

Como ha transcurrido un largo espacio de tiempo desde que me enganché, esperando que alguno de los internautas se pusieran a tiro, y a la vista de que no entra la caza, aunque Juanito se habia conectado no se ha debido apercibir de mi aviso, me dedicaré a escribir unas líneas mientras llega la hora de tomar una fruta, adelanto de la cena que llegará pasadas no muchas horas. A consecuencia del cambio o retraso relojero, hoy me he levantado más "trempano", coloqué una de los piconeros. A las ocho de la mañana, como si fueran las nueve de ayer, salí del archivo sabanero, no en vano me habia metido en él a las doce y no es conveniente permanecer demasiado tiempo sobando. No se suele decir que quien mucho duerme poco vive?. A la atribulada la excluiremos de esta aseveración, hoy tenia mucho trajín con el cumple de la más pequeña de la tribu y necesitaba, como los osos para la temporada de hibernación, recargar las pilas para después no quedar desfallecida a mitad de la jornada. Mañana se inicia una nueva semana y volvereis otra vez al trabajo, yo tengo permiso de mi empresa y me dedico a actividades menos ligadas a un jefe, o varios, que te están machacando constantemente. Ya colmé mi cupo de aguante o resistencia a las embestidas del ordeno y mando. Ahora me erijo en encargado de mi propia tarea, así que distribuyo la jornada a conveniencia del demandante.