Para mí

Pues si, como titulo, escribo para mi complacencia y también para que no se me diga que tengo olvidado este rincón. Yo, a imitación del Sr. Presidente del Gobierno de España, digo que mis reflexiones son para el viento si no hay "naide" que quiera compartirlas. Andaba mi meollo dando vueltas a la presencia de la ingente cantidad de banderas del Reino de España que por estas fechas pueden contemplarse en balcones y ventanas de aquellas calles por las que habitualmente pateo a diario. Me recuerda la última epidemia de gripe, que al final quedó en nada. Es tan inusual que estas manifestaciones patrioteras suelan emplearse que me hace recordar cuando no ha mucho tiempo la exhibición de este símbolo era considerado como cosa de ¡fachas!. Si, en la acepción que da la tercera entrada de la palabra del padre diccionario de la madre RAE. La verdad es que yo no entendia esa aversión hacia un símbolo que nadie pretendia monopolizar pues es patrimonio de todos los que, queriendo o no, tenemos la nacionalidad española; es como si recurrimos a algún artículo de nuestra Constitución, ¿hay algo malo en ello?. Lo que ocurre ahora es que la fiebre sobreviene como consecuencia de un acontecimiento deportivo en el que la selección futbolera hace enaltecer aquellos sentimientos de pertenencia a un grupo que se identifica con los ganadores. Tal vez tambien por que sirve como válvula de escape para soslayar otros problemas que acucian a muchos conciudadanos, sirva como botón de muestra la algarabia y el bullicio que se monta cuando "los de la roja", como los esnobistas la definen ahora, marcan un gol o al final cuando han ganado . Nos agarramos a la brocha que cuando se caiga nos dejará con el culo al aire, pues como suele decirse: esto es pan para hoy y hambre para mañana. Sin embargo tendré que concluir diciendo que bien venida sea la felicidad aunque ocurra por una causa tan nimia.