El regreso del bloguero

Tras varios dias de ausencia en estas latitudes, vuelvo para comentar que ya dieron comienzo mis clases en el cole, llevo dos dias con mis papeles y bolígrafo en ristre. Son materias que pueden resultar interesantes, algunas de las informaciones que se nos transmiten son conocidas, aunque viene bien traerlas al presente para remover las neuronas oxidadas y entre cuyo óxido se encuentran perdidas. Los compi son los mismos del pasado curso, puedo decir que no me encuentro como gallina en corral ajeno. Hoy, para probar el funcionamiento de la calefacción, he conectado una hora la caldera, también, tal como lo digo, por que notaba fresquito, los aparatos medidores de temperatura se encontraban en niveles más bajos de lo correctamente permitido. Digo ésto por las limitaciones que pretenden imponernos a base de lavado de coco, pues como es de lógica, en mi casa y con mis pertenencias hago lo que mejor convenga a mis deseos, por no expresarlo en términos más groseros, que a la postre también resultaria más comprensible. Para los que no moran por estas tierras, y para darles un poquito de envidia, notifico que el próximo lunes, igual que los funcionarios, yo tambien me encuentro de fiesta. Claro que mis holganzas son un poco relativas; excepto los trapicheos de visitas a los establecimientos para gastar dinero, el resto de faenas se repiten de un dia para otro. Es como si ponemos un retrato frente a un espejo, siempre reflejará la misma imagen.