Vuelvo el cole

Estamos en el mes en el que, según mis papeles, cumplo los setenta. Hoy he recibido una felicitación de El Corte Inglés. Estarán haciendo méritos para que haga uso de la tarjeta, hasta la fecha no la he utilizado y querrán que me deje los dineritos allí. Más adelante tendremos oportunidad de tirar de ella. Ayer, después de andar husmeando en la página de la Universidad extremeña para localizar cuando se iniciaban los cursos para mayores, sin lograr obtener la información que buscaba, por la noche llamo a Cristina y dió lo coincidencia que se encontraba allí Adela, que al enterarse quien era el llamante dijo que me esperaba el próximo martes. Conclusión: el dia siete volvemos a retomar las tareas colegiales. Veremos si resultan tan atractivas como el pasado curso. Mis ocupaciones se amplian, las horas se van a acortar, con tantas faenas: compras, preparación de comidas, caminatas, cole, en fin como si no estuviese jubilado. Como intuyo que más de uno que lea lo anteriormente expuesto pueda esbozar una sonrisa un tanto sarcástica, quiero anticipar que me alegraría que esa sonrisa pudiera convertise en una sonora carcajada sentida y prolongada, ya que oí varias veces, en un programa televisivo relacionado con la salud, al presentador, médico él, que al finalizar la emisión decia la siguiente frase: ¡sean felices y rian que la risa es salud!. ¡¡Va por "vusotros", grandísimos potros!!.