Como inicio, responderé al Sr. Manchón. En efecto, las consecuencias garbanceras se hicieron notar por las tormentas que, cargadas de abundante sonido, se escucharon en un 4º piso del Nuevo Cáceres. No hubo ningún incidente lamentable, más bien al contrario, la tranquilidad que aquella tronada producia era tan relajante que los ánimos se incrementaban en proporción directa al estruendo. ¡Qué placer!, cuanta alegria invadia mi espíritu notando como un ejercicio tan antiguo, ultimamente poco practicado, reaparecia de repente. El observar como rebotaba en el sofá hacia sentirme más joven, con más vitalidad. He repetir la experiencia para comprobar si esas sensaciones han sido una nube de verano o siguen arraigadas en mi interior.
Ahora, continuando con el viento, quiero relatar las aventuras que, durante mi paseo matutino, he tenido que pasar. El aire en movimiento era en ocasiones tan fuerte que a mi cuerpo, de peso pluma, lo hacia tambalear, particularmente en una zona donde me daba de frente. Tenia que hacer grandes esfuerzos para vencer la resistencia que la ventolera me ofrecia. Era como un pequeño velero en altamar, zarandeado por enormes olas. Mientras ésto escribo, además del sonido de las persianas, se ha caido la fregona con su correspondiente cubo, que está ubicado en la terraza del balcón. Cuando salga esta tarde, si no se pone a llover, tendría que colocarme, como los buzos antiguamente, unos zapatos para asegurar mi estabilidad. Como veis, hoy todo está relacionado con el dios eolo, culpad a quien me ha inducido a tomar esta senda, aunque le agradezco su interés al preocuparse de mi integridad física. Mañana será otro día, confiemos en poder seguir apareciendo por estos lugares, vertiendo expresiones bobaliconas o manifestando opiniones que no tengan un contenido muy relevante. Se trata, principalmente, de distraer al personal y deshollinar las neuronas que van quedando oxidadas.
jueves, 5 de marzo de 2009
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5 comentarios:
Eso, yo diciendo que hay que guardar un poco el anonimato y tu dando tu direccion...Haz el favor de borrar cuanto antes esto...edita este post!!
Por lo demás, !pedorro! jajaja
Muy adornado todo, pero muy guarros
Estimado Sr. "Urelio",
El que firma se satisface enormemente que, a su edad, los efectos gastro-intestino-anales sigan siendo como los de un jovencito.
Por cierto, y a cuento del Sr. Eolo, diré, aunque no sé si afirmar dados los comentarios precedentes, que en el supuesto caso de que la legumbre no hubiera hecho el efecto "deseado" imaginese, además, lo que hubiera sido pasear esta mañana contra el viento y pedorrearse al mismo tiempo dado que, algún convencino nuestro, podría haber asestado "a vuela pluma" un cierto tufillo-saborcillo en cual boca abierta.
estoy de acuerdo con juanito, ¿cómo quieres que presuma de que mi padre tiene un blog????!!!!Joder, que tenemos una reputación que guardar,me cago en la leche...
si es que me haces hablar mal....
si quieres se lo paso a mi familia política......
Interesante blog.
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