lunes, 18 de agosto de 2008
Aquí sigo
Haciendo uso de aquella famosa frase que un humorista hizo célebre en la tele, ahora digo: "yo, sigo". No es que me encuentre muy inspirado para iniciar una filípica contra tanto zángano, gaznápiro, zote, palurdo, falso y falto de escrúpulos que se consideran los salvapatrias y que solo son una rémora para los que no nos queda otra solución que pagar impuestos y depositar una papeleta en la urna a la que cada cierto tiempo nos llevan; por aquello que resulta muy democrático el nombrar a nuestros representantes, aunque casi siempre sean los mismos, mintiendo de forma permanente, para embaucar a la grey, y que luego no dan ni un palo al agua. Voy a cortar este ramalazo de rabia que ha invadido mi mente y voy a centrarme en cosas que, además de ser más livianas, son también menos escabrosas y en consecuencia más relajantes. "Mi niño" viene a decir que las vacaciones pasan en un soplo, el minuto en el trabajo tiene 120 segundos y en la holganza 30. Yo le digo: !no es cierto¡. Lo que ocurre es que nuestro estado de ánimo no está en la misma disposición en ambas situaciones. Seamos moderados, empezando por mi pellejo, gocemos de las pequeñas cosas que cada dia se nos ofrecen, no nos amarguemos con cualquier diminuta adversidad, sigamos firmes como los juncos que aunque el viento los incline no se caen y adaptémonos al medio y a la situación que vivamos cual si fuésemos unos camaleones que se disfrazan para no ser descubiertos. No es que nosotros tengamos que ocultarnos de nada ni de "naide", solamente solazarnos durante todas las horas que estemos con los ojos abiertos. Corolario, y con ésto finalizo hoy: lo dicho anteriormente es pura fantasia, el hijo de la "Urea" ni se lo cree ni tampoco pretende dar una plática pulpitera. Soy como mi madre me parió y aunque el transcurso de los años y las penalidades pasadas van minorando mis impulsos, siempre estarán los rescoldos prestos a reavivar el fuego que invade mi personalidad. Janito, hoy no te quejarás, tienes lectura para entretenerte.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
No me quejo, lectura de la gratificante.Y terapeútica, que viene bien conocer nuestros "monstruos"...
Publicar un comentario