viernes, 6 de marzo de 2009
Respondiendo, que es gerundio.
Me he quedado obnubilado, absorto y un "pelín" acomplejado, ante alguno de los comentarios suscitados con motivo de lo escrito ayer en mi blog. Cuando al fin consigo espantar las dudas y temores de mi mente, no puedo por menos que exclamar: ¡córcholis!, ¡canastos!, ¡caramba!, ¡cárape! (es lo mismo que la anterior), ¡jopé! (aunque se parece a la palabra empleada por una criticona, y tiene el mismo sentido en una de sus acepciones, resulta menos chocante), ¡puñetas!, ¡carajo! ( busquemos el significado en la línea que vengo utilizando), 'leñe!, ¡gallina joven!, ¡albóndigas masculinas!, ¡rayos! y ¡truenos!. Podreis observar como el final de mis exclamaciones guardan una cierta relación con el tema causante de esta réplica y de paso dúplica a posibles reincidentes. Pues, mira, Chucha, ante la amenaza de trasladar a tu familia poli el contenido de mis expresiones, desde este mismo momento y lugar, te autorizo para que lo hagas, pero con una condición: has de hacerlo en dos lenguajes, el oral y el mímico. Obviamente el primero resulta comprensible, pero al segundo hay que interpretarlo con gestos suficientemente aclaratorios y que sean comprensibles para quienes en su vida han roto un plato. U sease, textualizarlo bien. Como final y una vez desenojado (ver desenojo), paso a hacer algunas reflexiones: 1º.- ¿no es presuntamente cierto -no trato de inculpar- que la causa de toda esta ristra de manifestaciones también la ejerzan aquellos que con coronas o casullas, puñetas y oropeles, cuando entran en determinados recintos puedan poner en peligro su pudicia?. Lo digo por experiencia. El recato se pierde cuando en la soledad del armario, entiéndase como inodoro, se produce un cierto relajamiento al desalojar de nuestro interior un cierto tufillo, que, por aquello de la expresión, a ninguno nos huele. 2º.- No es menos cierto que muchos tabues pasados, hoy, con tanto progreso, libertad o libertinaje, han quedado en el olvido?. Rompamos barreras, agitemos las banderas de la realidad, no ocultemos sentimientos o expresiones que puedan coartar el desarrollo de nuestra personalidad. No seamos reprimidos, llegó el momento de soltar amarras y dejar que el velero, con sus velas extendidas al viento, nos transporte por mares repletos de ninfas, sirenas, corales y aguas tranquilas. Dejo mi retórica para otro dia.
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4 comentarios:
Me parece genial, pero eso sí, las cosas por su nombre... pedo, caca, culo...Ya está bien de rebuscados eufemismos!! Donde hay confianza da asco...
ODA AL PEDO
Alguien me preguntó,
¿Qué es un pedo?
y yo le contesté muy quedo:
el pedo es un pedo,
con cuerpo de aire y corazón de viento.
El pedo es como un alma en pena,
que a veces sopla,
que a veces truena.
Es como el agua que se desliza,
con mucha fuerza, con mucha prisa.
El pedo es como la nube que va volando,
y por donde pasa va fumigando.
El pedo es vida,
el pedo es muerte,
y tiene algo que nos divierte.
El pedo gime, el pedo llora,
el pedo es aire, el pedo es ruido,
y a veces sale por un descuido.
El pedo es fuerte, es imponente,
pues se los tira toda la gente.
En este mundo un pedo es vida,
porque hasta el Papa bien se lo tira.
Hay pedos cultos e ignorantes,
los hay adultos, también infantes,
hay pedos gordos, hay pedos flacos,
según el diámetro de los tacos.
Hay pedos tristes, los hay risueños,
según el gusto que tiene el dueño.
Si un día algún pedo toca tu puerta,
no se la cierres, déjala abierta.
Deja que sople, deja que gire,
a ver si hay alguién que lo respire.
También los pedos son educados,
pues se los tiran los licenciados.
El pedo tiene algo monstruoso,
pues si lo aguantas te lleva al pozo.
Este poema se ha terminado,
con tanto pedo que me he tirado.
http://www.telefonica.net/web2/curroga/ODAALPEDO.htm
Espero que con permiso del propietario de la web.
La oda al pedo muy conseguida, gracias al original y al transcriptor por emocionarnos con tales rimas que llegan a nuestro corazon y remiendan la pena con una risa
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