Hoy tenia visita con la enfermera, nivel de glucosa y tensión, además de pasar por el laboratorio para un chupado de sangre, ante la próxima cita con la endocrina. No he tenido que madrugar más de lo habitual, habia suficiente tiempo disponible para ambos trámites. Sin embargo, me he llevado una pequeña decepción ante la subida experimentada por mi azúcar, logicamente referida a la del pinchacito en el dedo. Tendré que esperar hasta el próximo dia cuatro, cuando me presente ante "la Fraile" y abra el sobre conteniendo el resultado, no me gusta anticiparme, para confirmar o negar el resultado dado en el Servicio Extremeño de Salud. Posteriormente, tras devorar una manzana y un yogur, la hora no invitaba a ingerir un alimento más sólido, me dediqué a recolectar cajas cartoneras que serán ubicadas encima del plástico que pondrán los albañiles que mañana harán acto de presencia con la finalidad de quitar la bañera e instalar el correspondiente plato. Esto último me puede ser de utilidad en el supuesto de que se presenten muchos comensales, se pone la comida encima y a meter la cuchara y paso atrás. También, como queda plasmado en la foto que aporto, me pasé por correos para retirar la célebre bombilla del Sr. Sebastián. Con un cierto retraso, pero al final llegó el artilugio que permitirá ver la luz eliminando las tinieblas, con un consumo más racional. ¡La leche, como he rematado la entrada!
miércoles, 22 de julio de 2009
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